Scarlett Johansson y Eva Longoria
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Como es tradicional, cada vez que se celebran elecciones a la presidencia de los Estados Unidos, el mundillo de la farándula vuelve a rodar anuncios para captar los votos de los estadounidesnses.

     Si en las pasadas elecciones el lema para el cambio fue famoso «Yes, we can» en favor de Barack Obama, con su cancioncita y todo; ahora toca el turno de su posible reelección, y maquinaría propagandística ha encontrado una razón para movilizar a su electorado: El aborto.

     Así que, Scarlett Johansson, Eva Longoria y Kerry Washington, se han puesto manos a la obra para prestar su imagen en defensa del aborto. El video entremezcla el atractivo de las actrices con un mensaje pro-muerte, para estimular el cerebro de los simples y vacuos en los eslóganes amorales que sostienen. El mensaje es sencillo:

     «Quiero hablarte de las mujeres y de Mitt Romney. Mitt Romney quiere acabar con la financiación de maternidad planificada, incluyendo el escáner de cáncer.

     Él dijo que hay que desandar el camino andado.

     Tenemos a los republicanos tratando de redefinir la violación, tratando de obligar a las mujeres a estar bajo ultrasonidos invasivos.

     Si tú piensas que estas elecciones no te van a afectar a ti o a tu vida, piénsatelo otra vez. Vota. Vota. Vota por Barack Obama».

El aborto en los Estados Unidos es uno de los negocios más prolíferos, ya que se subvenciona con dinero público su práctica por parte de clínicas privadas. Así que, cuantos más abortos, más dinero reciben las clínicas procedente de todos los rincones de la sociedad estadounidense, algo que como muestra este video, es del agrado de las Johansson, Logoria y compañía.

     Así que el anuncio, dirigido por Robert Reiner, carga contra el candidato republicano, Mitt Romney, a quien acusan de pretender «acabar con los fondos para el Planned Parenthood», organización abortista que se vio envuelta en un grave escándalo en 2011, cuando uno de sus empleados fue grabado con cámara oculta colaborando con un actor que simulaba ser un proxeneta que buscaba ayuda para que sus prostitutas menores de edad abortaran.

     Planned Parenthood teme que su negocio de la muerte pueda verse perjudicado si los republicanos llegan al poder, y por eso han puesto el grito en el cielo ante las declaraciones de Mitt Romney. Los republicanos que son abiertamente contrarios al aborto, quieran acabar con la financiación vía impuestos de todos los estadounidenses a las clínicas abortistas. Si está mal de por si que el aborto se practique, está mucho peor que se haga con fondos de personas que están completamente en contra, sin contar con su capacidad de decidir. Obviamente si pudieran decidir, no financiarían abortos.

     El director del anuncio añadió que tanto Romney como Paul Ryan, el candidato republicano a la vicepresidencia, «destriparán los derechos de las mujeres» si son elegidos en las presidenciales del 6 de noviembre. «Estaríamos hablando de deshacerse del derecho al aborto, los métodos anticonceptivos y el acceso a las revisiones sanitarias. Como esposo, hijo y padre, no puedo permitir que esto suceda». Es profundamente desafortunada la afirmación de Robert Reiner, al emplear el término destripar, máxime tratándose de un tema como el aborto. Pero en fin, así es esta gente.

     En cuanto a la afirmación de los republicanos quieren quitar los fondos a las clínicas abortistas impidiendo que se hagan escáneres para detectar el cáncer, es una idea torticera, pues las mamografías que hace Planned Parenthood también están a disposición de las mujeres en la tan criticada seguridad social estadounidense y sin necesidad de dar dinero para matar a bebés en gestación.

     En economía no entramos, en política exterior e interior tampoco. En lo que se refiere a la defensa de la vida, de ahí no nos movemos.

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