¿Sabías que Saúl no fue el primer rey que tuvo Israel? Es bastante común la idea de que el Rey Saúl fue el primer rey que tuvo Israel, sin embargo hubo un rey con anterioridad a Saúl, y su reinado duró tres años. Elección del Rey Saúl (1ª Samuel 8-10)
La elección de Saúl como rey, supuso el término y el inicio de dos periodos dentro de la historia de Israel. Por un lado, conllevó el fin de la era de los jueces, que duró unos 180 años más o menos, y por otro comenzó la dinastía de los reyes que duró unos 440 años.
Samuel había envejecido y sus hijos corrompieron los puestos de jueces que ostentaban, esto provocó que los ancianos de Israel pidieran a Samuel el establecimiento de una monarquía. Al leer el texto, pueden parecer buenas y lógicas las pretensiones de los ancianos. Los jueces actuales, Joel y Abías, no andaban en integridad, sino que se dejaban sobornar y pervertían el derecho. Ni Joel ni Abías habían sido puestos por Dios, sino por voluntad de Samuel, por lo que el reproche hacía ellos era lógico y justo. Sin embargo, al pedir la instauración de una monarquía “como tienen todas las naciones” (1ª Samuel 8:5) es lo que supuso un acto de rebeldía hacia Dios.
La elección de Saúl fue como consecuencia de esta insubordinación contra la soberanía y voluntad de Dios. (1ª Samuel 8:7 «Y dijo Jehová a Samuel: Oye la voz del pueblo en todo lo que te digan; porque no te han desechado a ti, sino a mí me han desechado, para que no reine sobre ellos»).
Samuel, hablando lo que Dios le decía, expone los inconvenientes, obligaciones, cargas y abusos que supondría el constituir una monarquía. Sin embargo el pueblo, decidió que las prefería en relación con el actual sistema (1ª Samuel 8:18-20 “Aquel día os lamentaréis a causa del rey que habréis elegido, pero entonces Jehová no os responderá. Pero el pueblo no quiso oír la voz de Samuel, y dijo: No. Habrá un rey sobre nosotros, y seremos también como todas las naciones. Nuestro rey nos gobernará, saldrá delante de nosotros y hará nuestras guerras”).
Dios eligió a Saúl como rey, una persona cuya apariencia causaba la impresión entre el pueblo. Era hermoso, alto y de buena presencia (1ª Samuel 10:23 “desde los hombros arriba era más alto que todo el pueblo”). Tanto es así, que entre el pueblo se desató la alegría por su nombramiento (1ª Samuel 10:24 “¿Habéis visto al que ha elegido Jehová, que no hay semejante a él en todo el pueblo?”).
De esta forma se constituyó, el segundo rey de Israel.
Abimelec, el primer rey de Israel (Jueces 9)
La historia del reinado de Abimelec, hay que situarla en los tiempos inmediatamente posteriores a Gedeón. Abimelec fue un hijo que Gedeón tuvo con una concubina que estaba en Siquem (Jueces 8:31). Después de la muerte de Gedeón se produce el levantamiento de Abimelec y su autonombramiento como rey.
Después de la muerte de Gedeón, Abimelec fue a buscar apoyos entre sus familiares en Siquem para consolidarse como rey. Apelando a lazos de consanguinidad y familiaridad (“¿Qué os parece mejor, que os gobiernen setenta hombres, todos los hijos de Jerobaal, o que os gobierne un solo hombre? Acordaos que yo soy hueso vuestro, y carne vuestra” Jueces 9:2), consiguió que los hermanos de su madre convencieran al resto de habitantes de Siquem para apoyar su iniciativa.
Arropado por mercenarios, se acercó a Ofra y mató al resto de hijos que había tenido Gedeón. En total, mató a setenta de sus hermanos. Sólo se libró Jotam, el hijo menor de Gedeón.
Abimelec, fue una persona sanguinaria y belicista. Acabo siendo rechazado por los mismos habitantes de Siquem que le ayudaron a llegar al poder. Murió al intentar prender fuego a la torre de Siquem en la que se escondían los habitantes de esta ciudad, cuando una mujer arrojó un pedazo de rueda de molino a la cabeza de Abimelec. El golpe fue crítico, hasta el punto que le partió el cráneo. En una última muestra de su carácter orgulloso, pidió a un soldado que lo matase a espada, para que no se dijera de él que lo había matado una mujer.